Entre los efectos más comunes de consumir marihuana (y de los más visibles, además del olor) están los ojos rojos. Esto de esperarse, claro, pero no responde a la misteriosa pregunta hecha por generaciones y generaciones de fumadores: ¿Por qué la hierba te enrojece los ojos?
Lo más interesante de todo radica en que tus ojos enrojecidos no tienen nada que ver con el acto de fumar.
Después de consumir cannabis o alguno de sus productos (llámese fumar cogollos, dabs, vaporizar, ingerir algún comestible, etc.), generalmente experimentamos un aumento en la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Esto se debe a los cannabinoides de la planta, que son compuestos químicos responsables de algunos de los beneficios terapéuticos y medicinales del cannabis, y su interacción inicial con el cuerpo. Dicho aumento de la presión arterial y la frecuencia cardíaca es comparable a las actividades físicas normales como el ejercicio o el sexo.
En general, la frecuencia cardíaca tarda de cinco a 10 minutos en volver a la normalidad y la presión arterial comienza a disminuir. A medida que disminuye la presión arterial, esto conduce a la dilatación de los vasos sanguíneos y los capilares, incluidos los capilares oculares. La dilatación de los capilares oculares provoca un aumento del flujo sanguíneo a los ojos, lo que hace que los ojos se enrojezcan en el proceso y también reduce la presión intraocular.
Incluso esta misma capacidad del cannabis para aliviar la presión intraocular en los ojos es lo que lo convierte en un tratamiento potencialmente viable para el glaucoma, un grupo de trastornos oculares que causan daño a los nervios ópticos y pueden conducir a la ceguera. También explica por qué tus ojos se ponen rojos después de fumar cannabis.
La evidencia de que el THC que se encuentra en el cannabis puede reducir la presión intraocular (PIO) es una razón importante por la cual muchos pacientes con glaucoma han intentado usar marihuana medicinal para tratar y aliviar los síntomas de la enfermedad.
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Es importante saber que algunos estudios han contradicho o agregado una advertencia a la afirmación de que el cannabis es beneficioso para el glaucoma. Un estudio de 2018, realizado en la Universidad de Indiana, por ejemplo, encontró que el cannabidiol (CBD), el cannabinoide no intoxicante que se encuentra en la marihuana, podría empeorar la afección al aumentar la presión ocular. Sin embargo, se necesita más investigación sobre el consumo de cannabis para el tratamiento del glaucoma.
