El gigante de los supermercados de los EE.UU planea dejar de vender cigarrillos electrónicos tras las noticias sobre la enfermedad que afecta al vapeo.
Mientras que, para algunas cuestiones, como el control de armas, los estadounidenses se las cogen con papel de fumar, para el caso del vapeo la forma de actuar es categórica: mejor retirar los vapeadores del mercado.
Así como en algunos estados están tratando de prohibir los cartuchos con algún tipo de condimento extra (es el caso de Nueva York), otros prefieren ir a degüello y acabar con los cigarrillos electrónicos.
“Dada la complejidad entre la regulación federal, estatal y local y la falta de certeza en relación a los cigarrillos electrónicos, estamos planeando dejar de vender productos electrónicos de nicotina en los Walmart y los Sam’S Club de los EE.UU”, dice el memorando de Walmart sobre este asunto. “Estaremos fuera después de vender parte del inventario”.
Pese a citar las leyes federales y lo complejas que son respecto a esto, lo cierto es que si no fuesen por los casos de la enfermedad que afecta al vapeo Walmart no se hubiese planteado esto. Hasta el momento se sabe, aunque no con una certeza absoluta, que el problema con los cigarrillos electrónicos está en los cartuchos que utilizan acetato de vitamina E, que resulta peligrosa para la salud pulmonar cuando se calienta mediante un vapeador.
Después de que los vapeadores se asentaron como una alternativa más saludable que el tabaco, resulta que estamos ante las puertas de una dolencia grave que está causada por esta forma de consumo pero que aún se desconoce exactamente cuál es el problema. Esto podría ser un golpe mortal para este tipo de dispositivos en su momento de crecimiento más dulce.
Lo de que es “más seguro” es una opinión común que está alentada por los manufactureros. Este pasado mes la Food and Drugs Administration (FDA) tuvo que enmendar la plana a la empresa Juul. Esta aseguró que la FDA había dicho que “el vapeo era un 99% más seguro que fumar tabaco”, algo que estos nunca han afirmado.
Por su parte, Donald Trump, actual presidente de los EE.UU, tuvo una reunión de urgencia con sus asesores en la que se cuestionó si prohibir a nivel federal los vapeadores. Aunque de momento no parece que mueva ficha, la reunión se planteó a favor de prohibir su uso.
Todo esto mientras siguen ingresando gente en hospitales, algunos incluso muriendo (este pasado viernes se registró otra víctima) y nadie tiene aún claro al cien por cien qué está causando estos serios problemas respiratorios.
Fuente: Cáñamo
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