Las ventas minoristas de marihuana recreativa comenzarían en Virginia el 1 de enero de 2023, bajo la legislación de la administración del gobernador Ralph Northam, que además de poner fin a la prohibición estatal de la droga eliminaría muchas condenas penales pasadas y crearía un fondo estatal para ayudar las personas arrestadas por delitos relacionados con la marihuana inician negocios legales.
Northam se pronunció a favor de la legalización a fines del año pasado y su proyecto de ley, que se hizo público por primera vez el miércoles, representa un punto de partida para lo que se espera sea un largo debate durante la sesión legislativa que comienza esta semana.
“La prohibición de la marihuana se ha basado históricamente en la discriminación y el impacto de las leyes de criminalización ha dañado desproporcionadamente a las minorías en las comunidades de bajos ingresos como resultado”, dijo la senadora Louise Lucas, demócrata por Portsmouth, quien lleva la legislación al Senado con el senador Adam Ebbin, D-Alejandría. “Estamos enfocados en deshacer esos daños”.
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Cronología
Cuando Northam anunció su apoyo a la legalización, dijo que no planeaba apresurar el proceso, citando la experiencia de los reguladores en otros estados.
Fiel a su palabra, su legislación establece un calendario de dos años en el que los funcionarios comenzarían a redactar regulaciones y emitir licencias para las empresas de marihuana antes de que las ventas minoristas comiencen en 2023.
Hasta entonces, la mayoría de las leyes estatales actuales que rigen la droga permanecerán en vigor y la droga, aunque actualmente está despenalizada, seguirá siendo ilegal y sujeta a las sanciones penales y civiles existentes.